Aunque se trata de un espacio lúdico donde lo importante es dejar volar la imaginación hay ciertos tips que pueden ayudarte a lograr un lugar mágico y ordenado.
1. Crea un ambiente al que no le falte luz natural, así se verá más amplio y será más amigable.
2. Mantén los muebles grandes (camas, armarios, escritorios) en colores claros y neutros y deja el color para las piezas pequeñas, juguetes, textiles o accesorios. Así no cansarás la vista ni tendrás sensación de caos.
3. Delimita el espacio. Si el cuarto o rincón de juegos está dentro de otro ambiente (como el dormitorio de los niños o la salita de tv o la propia sala de tu casa) usar por ejemplo una alfombra u otro color en la pared puede ayudarte a dividir el espacio y que se sienta exclusivamente para ellos.
4. Crea muebles que estén a su medida. Ni muy altos ni muy bajos porque los niños crecen rápido.
5. Ayúdalos a ordenar. Tener cajas donde puedas escribir lo que contiene cada una, cestas o tuppers de colores los estimulará a ordenar sin que se sienta como una obligación y más como un juego. Crea estanterías que tengan espacios para guardar estas cajas o cestas que incluso pueden estar a la vista.
Aquí les dejo con algunas ideas para que se inspiren un poco y se animen a crearles un lindo rincón a sus peques :)
Me parece lindo como se utilizan aquí las paredes. En la segunda foto se ha puesto un panel de madera con pizarras y donde además se pueden colgar cosas…genial!
Las pizarras son perfectas para que los niños dejen volar su imaginación y pinten, dibujen, etc. Ojo aquí a las estanterías, que tienen espacios y repisas abiertos para guardar libros, colocar canastas organizadoras etc. No todo tiene que estar cerrado o abierto, puedes combinar para que los muebles se vean más dinámicos.
Como ves no necesitas un espacio enorme. Un pequeño mueble, una mesita y una alfombra pueden hacer maravillas como en este caso:
Fuente y fotos: www.elmueble.com
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